Paco Balbuena despide el año trayéndonos una pizca de la maravillosa música que produce Max Richter, y la usa de fondo para lanzar un inmejorable mensaje navideño: reivindicar los derechos humanos.
Paco Balbuena despide el año trayéndonos una pizca de la maravillosa música que produce Max Richter, y la usa de fondo para lanzar un inmejorable mensaje navideño: reivindicar los derechos humanos.