Conducir un taxi es duro, por las horas de espera, que se hacen interminables si hay poco movimiento y por lo que supone volver a casa, habiendo hecho tan solo en ocasiones una carrera, de 6 euros en todo el día.
Los taxistas de Casares, están contentos con su profesión, pero manifiestan que con la crisis la facturación se ha visto reducida a la mitad. El descenso del turismo y el aumento de desempleo están dejando al sector estancado durante el invierno, según explica David Rojas, propietario de un taxi en Casares.
La escalada en el precio del combustible y la falta de ayudas para los meses de sequía turística, hacen que cada vez sea más difícil sobrellevar los meses de invierno.
En Casares hay 6 taxis que se reparten el negocio. El uso del taxi, ahora es casi exclusivo de los turistas. Los residentes lo utilizan como algo excepcional y cada vez menos, según los profesionales.
Las carreras más frecuentes: Sabinillas o Estepona. Las más rentables: al aeropuerto o a Marbella. Por eso les gustaría contar con más actividad comercial y de ocio nocturno en la zona.