Gonzalo García comenta las reacciones que se han producido a raiz de la Marcha por la Dignidad del 22 de marzo. Cuestiona la credibilidad de los medios convencionales por el tratamiento informativo, critica la intervención policial en las calles de Madrid y la gestión del Gobierno central que, en su opinión, han querido criminalizar la movilización ciudadana. Punto de vista